Según la Organización Mundial de la Salud el tabaco es la primera causa de enfermedad, invalidez y muerte prematura del mundo

El tabaquismo es la adicción que se tiene al tabaco, y que va a traer como consecuencia diversas enfermedades, entre las dos principales las que comprometen:

- Al sistema cardiovascular: aterosclerosis, hipertensión, insuficiencia cardíaca, etc.
- Al aparato respiratorio: bronquitis crónica, enfisema pulmonar, cáncer de laringe, cáncer de pulmón, etc.

La adicción a la nicotina se considera una enfermedad adictiva crónica con posibilidades de tratamiento

El tabaco:
El tabaco es un producto vegetal obtenido de las hojas de plantas nicotiana tabacum.

Se consume de varias formas.  Fumar es la más generalizada de ellas, otra forma bastante extendida es la de mascar el tabaco.

Se comercializa legalmente en todo el mundo, si bien, en las últimas décadas han aparecido en muchos países diferentes restricciones a su consumo ya que posee efectos adversos para la salud pública.

Su particular contenido en nicotina la convierte en adictiva
El humo del tabaco incluye más de 4.000 componentes químicos, la mitad de estos se encuentran originalmente en las hojas de tabaco y la otra mitad son creados por reacciones químicas al quemarse el tabaco.

Más de 40 de estos son cancerígenos
Su composición básicamente está formada por el alcaloide nicotina, que se encuentra en las hojas en proporciones variables (desde menos del 1% hasta el 12%).

El resto es alquitrán, una sustancia resinosa compuesta por varios agentes químicos,—muchos de los cuales se generan como resultado de la combustión— como el cianuro de hidrógeno, el monóxido de carbono, el dióxido de carbono, el óxido de nitrógeno y el amoníaco.

El desglose de su contenido tóxico muestra que:
- Cada cigarrillo contiene entre 7 y 20 mg. de alquitrán.
- Cada cigarrillo produce 80 cm3 de monóxido de carbono, que reduce en 10 % la capacidad de transporte de oxígeno sanguíneo.
- Otros tóxicos presentes: amoníaco, alcohol metílico, ácido clorhídrico, furfural, aldehídos, arsénico, polonio radioactivo.

Pero además, como consecuencia de la combustión del tabaco se forman compuestos llamados radicales libres. Estos compuestos se combinan con los tejidos con los que toman contacto y los dañan.

Efectos del tabaco
El tabaco es un estimulante el sistema nervioso central. Sin embargo, en los adictos produce el efecto contrario: relajación.

El hábito de fumar aumenta la tolerancia a la toxicidad del tabaco, por lo tanto, los efectos agudos que pude producir, —como, por ejemplo, mareos, vómitos y sudoración—, se reducen gradualmente. En términos generales, podemos clasificar los efectos del tabaco en dos niveles: el psicológico y el físico:

Efectos de la nicotina en el sistema nervioso
La acción de la nicotina ocurre a nivel de diferentes receptores en el sistema nervioso haciendo efecto a nivel molecular. Entre los neurotransmisores liberados por la acción de la nicotina y sus acciones se incluyen:
- La dopamina y su efecto relacionado con placer y supresión de apetito
- La serotonina implicada en la modulación del ánimo y supresión del apetito
- La noradrenalina relacionada con la supresión del apetito y el despertar
- La acetilcolina implicada en el despertar y el aumento de las funciones cognoscitivas
- La vasopresina y la asociación con el mejor desempeño de la memoria
- El glutamato que posiblemente asociado con un efecto positivo en el aprendizaje
- La gama endorfina relacionada con la modulación del afecto y dolor

Daños en el organismo y enfermedades asociadas al tabaquismo
El consumo de tabaco constituye la principal causa de enfermedad evitable y de mortalidad prevenible en el mundo.

Entre las enfermedades y eventos agudos asociados a esta adicción merecen señalarse:

Enfermedad cardiovascular:
El monóxido de carbono, que es el causante de más del 15% de las enfermedades cardiovasculares.

El tabaquismo tiene una significativa incidencia en las arterias de mediano y pequeño calibre que son las encargadas de distribuir sangre por todo el organismo, favoreciendo el desarrollo de las siguientes enfermedades cardíacas:

Aterosclerosis/ coronariopatía:
El aumento de la constricción de las arterias (vasoespamo) y de la agregación plaquetaria (acumulación de células que favorecen a la formación del coágulo) favorecen la obstrucción del flujo sanguíneo en las arterias coronarias, permitiendo el desarrollo de:
- Hipertensión:la presión arterial promedio en los fumadores es mayor que en los no fumadores.
- La liberación de sustancias que aceleran el corazón y aumentan la presión en un corazón ya enfermo predispone a la muerte súbita.
- Aumenta 10 veces la posibilidad de desarrollar un infarto de miocardio.

Enfermedad Cerebrovascular:
Se debe a una falta de llegada de sangre —causada por procesos ateroscleróticos— transitoria o definitiva, a una porción de la masa cerebral. Es causa de cuadros de hemiplejía, apoplejía, paraplejías, paresias, etc.

Enfermedad vascular periférica:
Esta enfermedad es mediada por la lesión aterosclerótica de las arterias de los miembros inferiores. Se caracteriza por dolor en uno o dos de los miembros inferiores al caminar, lo que obliga a detenerse. El grado extremo de esta enfermedad implica lesiones del pie y gangrena del miembro que obliga a su amputación.

Enfermedades respiratorias:
La persona fumadora está expuesta a diferentes procesos inflamatorios nasales, de garganta y otras infecciones respiratorias. Dentro de las enfermedades respiratorias y pulmonares merecen señalarse:

- Bronquitis Crónica: consecuencia del efecto irritante de los componentes del tabaco al entrar en contacto con las células bronquiales. A su vez esto constituye un factor de riesgo de infecciones bacterianas y cáncer

- Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) que en etapas avanzadas tiene altísima mortalidad por insuficiencia respiratoria.

- Existe una relación causal entre el cigarrillo y el cáncer de pulmón, cáncer de boca y laringe.

- Enfermedades gástricas: la nicotina tiene un efecto negativo en el estómago, generando dificultades de la digestión. También incrementa la secreción de ácido clorhídrico por ese órgano, incrementando la posibilidad de sufrir acidez.

- Impotencia e infertilidad masculina: el tabaquismo es uno de los hábitos mas comúnmente implicados como responsable de disfunción eréctil. El paciente fumador presenta impotencia 50% más que el paciente no fumador y el 70% de los varones impotentes son fumadores. Los varones fumadores tienen reducida la movilidad de sus espermatozoides.

- Disfunciones hormonales femeninas: Las mujeres fumadoras entran a la menopausia aproximadamente 5 años antes que las no fumadoras. El cigarrillo y la nicotina pueden alterar la cantidad de hormonas relacionadas con la función reproductiva. Las mujeres menopaúsicas fumadoras tienen más riesgos de osteoporosis.

- Cáncer: la mortalidad anual por cáncer debido al cigarrillo es del 30% sobre el total de todas las muertes producidas por esta enfermedad. Existe relación causal entre el tabaco y los cánceres de pulmón, boca, laringe, esófago, vejiga, riñón, estómago, páncreas, cuello uterino, y de la sangre.

- Trastornos del sueño: Las personas fumadoras tienen más dificultades para conciliar el sueño y experimentan más alteraciones durante el mismo, lo que les lleva a padecer insomnio, dormir peor y descansar menos. El fumar ha sido asociado a los ronquidos y a la apnea del sueño.

Por último cabe destacar que la efectividad de varios medicamentos se encuentra reducida en las personas fumadores.

Cuando pensamos en tabaquismo solemos pensar en el fumador de cigarrillos. Nunca debemos perder de vista que existen otras formas de consumir el tabaco, por ejemplo por medio de pipas.

Epidemiólogos de la Sociedad Estadounidense del Cáncer, han señalado que los fumadores de pipa:
 

Multiplican:
- Por cinco el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón
- Por cuatro el de cáncer de cabeza y cuello
- Por seis las probabilidades de desarrollar EPOC

Presentan:
- Un mayor riesgo de cáncer de esófago, laringe, colon y páncreas.
- Un riesgo un 30% más elevado de desarrollar cardiopatía isquémica
- Un 27% mayor de ictus

Los fumadores pasivos
Se denomina fumador pasivo al sujeto que, sin ser fumador, aspira el humo ambiental generado por los fumadores.

El fumador pasivo puede desarrollar las mismas enfermedades que el activo

En aquellas personas que respiran el llamado humo de terceros, esto equivale a fumar de uno hasta diez cigarrillos por día. Es un humo de corriente secundaria que puede contener hasta tres veces más nicotina y alquitrán, y hasta cinco veces más de monóxido de carbono que la corriente principal que aspira el fumador.

Los más perjudicados en su salud son aquéllos que permanecen horas cotidianamente en ambientes cerrados con fumadores ya sea por razones laborales o de convivencia con fumadores. Los niños con padres fumadores se encuentran entre los más afectados.
- Un fumador pasivo tiene entre un 20 a 30% más de riesgo de padecer enfermedad coronaria y cáncer de pulmón.
- Los hijos de padres fumadores tienen:
- Un 20% más de riesgo de sufrir asma
- Un 30% de infecciones respiratorias
- Un 50% de otitis

Y, por supuesto, generalmente presentan frecuentes catarros, tos persistente, y diferentes problemas respiratorios.